Seccionaleros “escombros” quieren al “Gallinero de Oro” en Itaipú
En su desesperado intento de ser director de Itaipú, Justo Zacarías Irún convenció a seccionaleros “escombros” para que lo apoyen.
Integrantes de la Seccional Colorada N° 7 de Ciudad del Este, estarían anhelando algún cargo importante en la Itaipú y en ese afán, pidieron al presidente electo de la República, Santiago Peña a nombrar a Justo Zacarías Irún como director paraguayo de la entidad binacional.
En el manifiesto firmado por los políticos “escombros” señala “Solicitamos que la Dirección General Paraguaya de la Itaipú Binacional sea para un paranaense”, sin contar que “Lucho” tiene dudosos antecedentes como gobernador de Alto Paraná.
Desde que fue titular de la Gobernación, “Lucho” Zacarías Irún es conocido también como el mentor del “Gallinero de Oro”, que se facturó en su momento con casi 15 millones de guaraníes, siendo que costó solamente G. 9 millones. Fueron construidos 52 gallineros por la Gobernación a cargo del mencionado político colorado.
Ante la proximidad de la asunción de Santiago Peña como presidente de la República, el propio Justo Zacarías y su hermano, Javier Zacarías Irún, estarían haciendo un intenso lobby para lograr el objetivo de nombrar a “Lucho” como director general de Itaipú, lado paraguayo.
El clan Zacarías estaría presionando y a la vez ofreciendo cargos para que políticos de Alto Paraná lo apoyen en su intención de llegar a la Dirección General de Itaipú.
ITAIPÚ, UN BUEN “GALLINERO DE ORO”
Además del jugoso salario por ser la máxima autoridad paraguaya de la binacional, las intenciones del clan Zacarías sería aprovechar lo máximo la gran cantidad de dinero disponible en la entidad.
Justo Zacarías también es recordado por sus galletitas de oro, en su época de gobernador, por hacer facturar 20 mil guaraníes el kilo las galletitas que costaban solo G. 3.000 el kilo.
Asimismo, el entorno de “Santi” Peña, ya maneja que la familia Zacarías Irún sería un grupo indeseado en Ciudad del Este.
El clan fue expulsado de la Municipalidad de Ciudad del Este, por sospechas de alta corrupción. La última integrante de dicho grupo de presuntos delincuentes es Sandra María McLeod, quien fue destituida de la Intendencia por medio de una intervención y su salida fue decretada por la Cámara de Diputados.
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