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Donar Sangre para garantizar asistencia a pacientes de hospitales

Unos 120 mil volúmenes de sangre se requieren como mínimo para poder cubrir medianamente la demanda nacional y abastecer las necesidades en los hospitales.



Como habitualmente lo hace, Julio Mazzoleni Insfrán, Ministro de Salud Pública y Bienestar Social, donó sangre para iniciar el proceso de reabastecimiento de los volúmenes de sangre que se necesitan para garantizar la provisión en centros hospitalarios.

El titular de la cartera sanitaria manifestó que este acto es necesario para dar la posibilidad de una recuperación pronta para los afectados en diversos procedimientos, como en los episodios de traumas, como los accidentes de tránsito.

Indicó que los requisitos básicos para donar sangre es contar con 18 años cumplidos y hasta 60 años de edad; pesar más de 55 kg, además de ser una persona sana, sin antecedente de enfermedades o cirugías recientes. Las mujeres que están en periodo de embarazo, de lactancia, no pueden donar.

Es importante llevar la cédula de identidad para el registro correspondiente.

Los donantes voluntarios son sometidos a un primer filtro, que es la encuesta o entrevista. A través de la misma, se evita la donación de todas aquellas personas expuestas a situaciones de riesgo de infecciones que se transmiten por vía sexual u otras, que comparten también la posibilidad de legarse por vía sanguínea.

Si pasan la encuesta, se les toma la donación y luego se realiza el tamizaje serológico (prueba de laboratorio), para descartar VIH y otras enfermedades.

Lo esencial y lo no negociable es la seguridad de la sangre y la transfusión. Por ende, cada donante pasa por controles estrictos.

Algunos puntos a considerar con respecto a la donación de Sangre

La donación es a voluntad. Se puede hacer con la periodicidad necesaria, hacerlo una sola vez en la vida.

El tiempo de espera para la donación, luego de la realización de piercing y tatuajes, es de un año.

Luego de realizar la donación, se puede continuar con las actividades diarias normales. Además no implica ganar o perder peso.

La donación de sangre se puede llevar a cabo, aunque la persona haya comido o bebido minutos antes del acto, de hecho, es recomendable que no vaya en ayunas.