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Tito Torres: “Traté de calmarme y puse el GPS para llegar al hospital”

En una transmisión en vivo hecha en su cuenta de Instagram, el jugador relató los duros momentos vividos en el Ja´umina Fest.



A través de su cuenta oficial en Instagram, el futbolista del Olimpia, Iván “Tito” Torres, relató los duros momentos vividos en el Ja´umina Fest, donde su esposa, Cristina “Vita” Aranda, recibió un disparo en la cabeza que acabó con su vida.

“Tito” recordó que fueron al baño, en compañía de otras personas, caminando de la mano con su esposa. Al llegar al punto donde debían separarse, se despidió con un beso y fue al sanitario.

"En contados segundos escucho un alboroto, escucho que la gente grita: la gente dice Vita, Vita. Salgo corriendo y le veo en el piso tirada y pude sentir un calvario realmente. No sabía qué hacer, pensaba en mi esposa y en mis hijos”, relató.

La demora para la atención a la mujer herida se hizo eterna y, para colmo, la ciudad de San Bernardino no cuenta con un hospital donde puedan atender casos graves, por lo que la subieron a una ambulancia para trasladarla al Hospital Nacional de Itauguá.

“La ambulancia muy precaria, no tenía absolutamente nada, una ambulancia que no tenía personal preparado para este tipo de situaciones. Había solamente un balón de oxígeno, no había para intubarla, no había un hospital cerca, no había nada que realmente pudiera ayudar en ese momento”, recordó.

El viaje largo desde el anfiteatro hasta el Hospital de Itauguá fue una pesadilla para Torres, pues el conductor no sabía el camino y estaba perdido. “El tráfico era increíble y nadie quería dar paso. Al llegar a Itauguá el chofer no sabía donde estaba, no sabía qué hacer. Me calmé, le calmé a él y le puse el GPS para ir. Tardamos como 40 o 45 minutos para llegar”, aseveró.

Sobre las declaraciones de la directora del nosocomio, Torres sostuvo que mintió al decir que Vita llegó intubada al hospital, ya que en la ambulancia no había casi insumos y recién fue asistida al llegar. “Solo rezaba por ella, pedía a Dios que la salve, aunque ya sabía que iba a ser muy difícil. A mí me avisaron 20 o 30 minutos después que no aguantó y murió”, lamentó.