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Despedido conocida casa de electrodomésticos por ser homosexual

Recibía constantes ofensas de parte de su jefe directo.



La discriminación en nuestro país se vive día a día y más aún con los homosexuales, quienes deben aguantar todo tipo de insultos y malos tratos por parte de otras personas por sus preferencias sexuales y pasionales. 

Tal es el caso de Matías Ayala, un joven de 18 años que ingresó a trabajar en la firma Bristol S.A. de la capital del país el 10 de diciembre del 2018. Con el correr de los días, su jefe directo Carlos Cortessi lo llamó a una reunión y reclamó que no le haya confesado que es homosexual, pues tampoco es considerado un requisito para obtener el empleo, al menos no lo debería ser. 

Allí inició el calvario e ir a trabajar ya no era tan agradable.  

El propio Cortessi lo insultaba y llamaba por apodos poco agradables, por lo que decidió denunciar los acosos a Recursos Humanos con la idea de conseguir apoyo, pero la realidad fue totalmente otra, pues las opciones planteadas eran la renuncia o el cambio de sucursal, por lo que el actuar de su jefe quedaría sin sanciones.

Con impotencia, se retiró y siguió con su labor diaria. Dos días después Ayala fue liquidado por la empresa, pues era "demasiado nuevo como para generar problemas con los jefes y compañeros de trabajo".

POCA PRODUCCIÓN

Por su parte, Yanina Guerrero, gerente de Recursos Humanos expresó que el despido de Matías fue por falta de producción ya que no llegaba a las metas de ventas, además de supuestas llegadas tardías y que se encontraba en 60 días de prueba. 

A la vez confirmaron que Cortessi también fue despedido ya que la empresa no acepta ningún tipo de discriminación hacia sus empleados, aunque fue la primera denuncia de este tipo contra el funcionario. 

Matías desmintió la versión de la empresa y expresó que no le comentaron en ningún momento más motivos que el problema con el jefe. 

MINISTERIO A DISPOSICIÓN

Por su parte, el viceministro del trabajo le dio su apoyo a Matías y afirmó que están a disposición para realizar cualquier acción legal, pero Matías ya no tiene intenciones de volver a la firma, pero sí pretende recibir la indemnización por el despido injustificado, además de mantener su postura contra la discriminación.