Liz Crámer sembró esperanzas en el Este y luego decepcionó
La ministra de Industria y Comercio, Liz Crámer dejó en el olvido a la principal ciudad comercial del Paraguay. Tendría un trato con empresarios "pirateros".
Al igual que su viceministro de Comercio, Pedro Mancuello, la secretaria de Estado tiene en el olvido a Ciudad del Este y alrededores. Desde que fue puesta al frente del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), Liz Crámer no envió ningún grupo de fiscalizadores al Alto Paraná.
La omisión de Crámer desnuda su probable complicidad con comerciantes que trabajan al margen de la ley, quienes aprovechan estos últimos meses del año para “forrarse” de dinero a espaldas de los clientes, especialmente extranjeros.
Diariamente, los turistas son embaucados por los vendedores que ofrecen productos auténticos pero entregan mercaderías “piratas”. Varios artículos ofertados en los negocios habrían ingresado de contrabando, pero el MIC demuestra desinterés en intervenir.
Periodistas de este medio ya intentaron hablar con el viceministro Mancuello, pero éste no da la cara ante el mal ejercicio de sus funciones. Una veintena de llamadas fue en vano, teniendo en cuenta que sus asistentes excusan su silencio cómplice.
Ante las diversas publicaciones de la prensa y reclamos de empresarios altoparanaenses, en tan solo dos meses de gestión, Mancuello ya nombró a tres directores de Comercio Interior, cuyo rol es distribuir a los fiscalizadores en las principales ciudades del país.
El primer titular de dicha dirección fue Albert Araújo, quien luego fue reemplazado por Carlos Sanabria, pero éste duró solo un par de días en el cargo y actualmente se encuentra Víctor Monges para coordinar las tareas.
Las fuentes indican que ningún funcionario del MIC está pudiendo hacer su trabajo de fiscalización, pues existe una traba de la propia ministra Liz Crámer, quien tendría un trato económico con los comerciantes “pirateros” del Alto Paraná hasta fin de año.
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